Actualidad
Por María Isabel Triviño , 24 de febrero de 2022

Familia de joven osornina relata la dolorosa espera por un trasplante

  Atención: esta noticia fue publicada hace más de 2 años
Hace diez años a Paulina le diagnosticaron el síndrome de Budd Chiari.
Compartir

Paulina Mancilla Cárdenas, de 32 años, está internada en el hospital base y requiere con urgencia un hígado. Esta es la historia de su lucha por seguir viviendo.

“Es preciso que la sociedad tome conciencia de cuán importante es la donación de órganos, que la gente tenga empatía con quienes sufren, porque no solo va muriendo el paciente, es toda su familia la que se enferma”, afirma la osornina Damaris Cárdenas Cárdenas, madre de Paulina Stefanía Mancilla Cárdenas, quien se encuentra internada muy grave en la UCI del hospital base de esta ciudad. 

La osornina, cuyo caso ha sido dado a conocer su familia y amigos en redes sociales, presenta serias complicaciones derivadas de la enfermedad al hígado que la aqueja, y producto de la cual está en la lista de espera de pacientes que necesitan un trasplante de órgano.

Soltera sin hijos y orgullosa vecina de Rahue Bajo, Paulina es ex alumna de la escuela Claudio Arrau y del liceo Lourdes. Además, estudió Pedagogía en Lengua Castellana y Comunicaciones en la Universidad de Los Lagos, carrera en la que cursó hasta el cuarto año, tanto por sus problemas de salud como por dificultades económicas derivadas de su condición médica, relata su madre Damaris en diálogo con Diario de Osorno.

“Es una persona muy íntegra, muy justa, leal, amante de su familia y de sus siete gatitos, a quienes no puede acariciar por su enfermedad. Sus amigas y compañeras de universidad les regalan alimento, pues saben que son parte de su vida y los quiere como si fueran sus hijos. Su naturaleza la hace brillar”, cuenta emocionada su madre, quien además tiene otras dos hijas de 35 y 22 años.

Enfática, subraya que “de nada sirve que nuestros órganos vayan a dar a la tierra, si con ellos podemos darle vida a otro ser humano como mi hija. Ella pese a todos los altos y bajos, todo lo que enfrenta, todo lo que lucha, tiene muchas ganas de vivir a sus 32 años”.

En este contexto, cuestiona profundamente que pese a que muchas personas quieren ser donantes, lo deja por escrito o se lo comenta a sus cercanos, cuando fallece esta decisión muchas veces no es respetada por la familia. 

Recalcó que “es tan simple como respetar su voluntad”, pues afirma que es precisamente la falta de donantes lo que obliga a la Comisión Nacional de Trasplante a categorizar a quienes requieren un órgano, que demasiadas veces nunca llega.  

PRESENTE

Damaris relata a Diario de Osorno que Paulina es atendida por un equipo de tres gastroenterólogos que entregan información al hospital Juan José Aguirre de la Universidad de Chile respecto de su evolución médica y de las crisis que ha ido experimentando.

Agrega que si bien Paulina está en la lista de espera, “el puntaje con el que llegó es muy bajo. Dada la gravedad que tenía, debería haber sido mayor. No lo decimos nosotros como familia, sino que sus médicos lo señalan”, argumenta.

En este punto, comenta que el tema pasa por la citada Comisión Nacional de Trasplante que categoriza a los pacientes que están en la lista. Acota que esta instancia se basa en la alta existencia de pacientes que están en estado crítico, lo que se contrasta con la baja donación de órganos.  

“Si ella se logra estabilizar, su puntaje va a bajar”, lamenta su madre, quien añadió que “ojalá que esta presión social que queremos hacer de alguna manera logre conmover la mente o el corazón de algún médico de esta comisión y pueda subir al menos un puntito, para estar más cerca de un trasplante”, afirma su madre.

SÍNDROME

Damaris Cárdenas además recuerda que hace diez años a Paulina le diagnosticaron el síndrome de Budd Chiari, cuyo origen se desconoce y afecta a dos de cada cinco mil personas. 

Explicó que este síndrome se manifiesta obstruyendo las arterias y micro arterias de una persona y, en el caso de su hija, afectó las arterias que van a su hígado. 

Como consecuencia de lo anterior este órgano quedó hepático y luego se generó una insuficiencia o cirrosis, que es el resultado de un daño crónico causado por una enfermedad prolongada del hígado; que cabe recalcar no, necesariamente está relacionado con el consumo de alcohol, como se suele pensar. 

Fue por ello que Paulina hace una década fue intervenida en el Hospital Juan José Aguirre de la Universidad de Chile, procedimiento en el que indica “le instalaron un Tips porto-cava, que funcionó como puente para drenar su sangre”. 

Señala que la idea era evitar que sufriera encefalopatía hepática, que es un deterioro de la función cerebral por la llegada al cerebro de sustancias tóxicas acumuladas en la sangre, que normalmente deberían haber sido eliminadas por el hígado.

Pero añade que este “Tips porto-cava” ya no cumple la función, por los daños y desgaste que tiene el hígado de Paulina. 

“Solo sirve para la ascitis refractaria (acumulación de líquido en el estómago), que mi hija manifiesta de forma incontrolable. Hace tres meses le hacían punción abdominal cada dos semanas, ahora al tercer día tiene que volver a someterse al procedimiento”, comenta.

EVOLUCIÓN RECIENTE

La madre de la joven osornina cuenta que durante esos años su hija fue hospitalizada muchas veces, debido a que ha presentado diversas complicaciones que se traducen en una pésima calidad de vida., 

Junto con señalar que Paulina ya está presentado falla renal, contó que cuando la llevaron al Hospital Base de Osorno la noche de este lunes 21 de febrero llegó a reanimación y luego la pasaron a la UCI, por la hipotensión que presenta (presión demasiado baja) y las consecuencias que ello acarrea a su organismo.

Damaris explica que hace escasas semanas su hija fue hospitalizada durante 18 días por una encefalopatía hepática grado 3 que presentó en la casa.

“La internaron para estabilizarla para que no pasara a grado 4, porque habría quedado en estado de coma. Así, en una semana pudo recuperar la visión, la memoria, pero contrajo el covid-19 y, como estaba vacunada y no tiene problemas respiratorios, no se complicó durante la cuarentena”, recuerda Damaris Cárdenas, con la esperanza y la fuerza que le da el infinito amor por su hija. 

El deseo que en vida había expresado este hombre de 36 años fue respetado por su familia, permitiendo así dar esperanza y cambiar radicalmente la vida de siete personas. Este es el conmovedor testimonio de sus padres y hermanos.

Ver más
Si te interesa recibir noticias publicadas en Diario de Osorno, inscribe tu correo aquí
Si vas a utilizar contenido de nuestro diario (textos o simplemente datos) en algún medio de comunicación, blog o Redes Sociales, indica la fuente, de lo contrario estarás incurriendo en un delito sancionado la Ley Nº 17.336, sobre Propiedad Intelectual. Lo anterior no rige para las fotografías y videos, pues queda totalmente PROHIBIDA su reproducción para fines informativos.
¿Encontraste un error en la noticia?
Grupo DiarioSur, una plataforma de Global Channel SPA

Powered by Global Channel