“Nos enfermamos o nos morimos de hambre. Por eso, los pocos que pudimos cambiamos de rubro”, explicó Cecilia Alvarado, comerciante del tradicional Barrio Lynch, durante la nueva marcha pacífica que realizaron en Osorno la tarde de este jueves 19 de noviembre, protesta que esta mañana también desarrollaron locatarios de la Feria de Rahue y del Mercado Municipal, en las afueras de esos recintos.
Cecilia relató que vendía ropa usada y en la primera cuarentena empezó a vender mascarillas, guantes y elementos de protección, añadiendo que era la única opción para pagar el arriendo y alguna parte de las cuentas. “Hemos pasado el año sobreviviendo a media marcha, para poder seguir adelante y mantener a nuestras familias”, contó preocupada a Osornovision MP.
Jéssica Barría, secretaria de los locatarios de Lynch, señaló que “vamos a seguir manifestándonos a menos que den resultados conversaciones en las que ha participado nuestro presidente de la Cámara de Comercio del Barrio Lynch, Mario Uribe. Él se ha reunido con varios personeros y esperamos que haya alguna luz de aquí al lunes”, acotó.
Además, comentó que la situación que viven es crítica y ven a colegas bajando las rejas, por no pago del arriendo o de las cuentas básicas, luz, agua. “¿Quién nos coopera con eso, dónde hay soluciones para eso? Bienvenidas pueden ser las cuarentenas desde el punto de vista de la salud, y eso es comprensible, pero quién se preocupa de la parte económica de quienes tenemos que mantener a nuestras familias”, se preguntó Jéssica.
MERCADO Y FERIA
Al mediodía, Iván Montes, presidente del comité de locatarios del Mercado Municipal “Por un futuro mejor”, señaló que el recinto está cerrado desde marzo y, si bien hubo una pequeña ventana en septiembre, no sirvió de mucho.
“Venimos con problemas desde julio del año pasado por el corte de agua y somos más de 150 locales que estamos cerrados, lo que afecta directa e indirectamente a 1.800 personas que no podemos trabajar o recibir el sueldo para poder subsistir”, indicó molesto a Osornovision MP.
Además, criticó que “al gobernador y a la seremi de Salud, que ni siquiera se han dignado a preguntar acerca de la situación que estamos viviendo. Ellos están bien, pero nosotros no y hoy somos pocos, porque muchos tuvieron temor a venir por las represalias que pudiera haber. Pero aquí estamos”, subrayó.
Montes acotó que “una semana más de cuarentena es una semana más de hambre para algunos, de tristeza y de no poder ganarnos el pan de forma digna. Apenas alcanza para subsistir”, confesó el dirigente.
Unas de las comerciantes de ese recinto es Mercedes Negrón, quien expresó que “también queremos apelar al alcalde para que tome una decisión respecto de esta galería, porque acá hay confiterías, venta de alimentos de mascotas y de confort, son locales que venden productos esenciales y la cerraron en general”, cuestionó, a la vez que dijo que “cada uno verá y se hará responsable de si abre o no su local, o ampliaremos giro, pero algo tenemos que hacer”, recalcó.
Manuel Sánchez, presidente de la Feria Libre de Rahue, manifestó que “esto ha sido muy crítico para nosotros, han bajado más del 70% las ventas, llega muy poco público, la gente se complica porque tienen que pedir permiso para poder venir. Por eso, una vez más nos estamos manifestando en nuestro lugar de trabajo y le pedimos a las autoridades que traten de agilizar esto y se levante luego esta cuarentena”, insistió.
Y adelantó que “necesitamos que las autoridades nos escuchen, nos digan si nos van a ayudar y cómo. Mientras tanto, vamos a continuar manifestándonos con los comerciantes de Lynch, del centro, del Mercado Municipal y de la Feria Pedro Aguirre Cerda”, advirtió Sánchez.
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