Historias DiarioSur
Por Pablo Santiesteban , 22 de diciembre de 2020

Puerto Octay o el auge de la navegación en el Llanquihue

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El lago Llanquihue y el volcán Osorno son la mejor postal que puede ofrecer Puerto Octay en estos 129 años de existencia.
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[#HistoriasDiarioSur] Sus 129 años de vida celebra hoy esta comuna de la provincia de Osorno, una de las más bellas levantadas junto al lago y que mezcla el acervo cultural chileno y alemán.

Surgió a la par con el proceso de la colonización alemana del lago Llanquihue, Puerto Octay es una de las comunas más bellas de la Provincia de Osorno y se cree que ya desde 1852 empezaron a llegar los primeros habitantes. Con una vista maravillosa al imponente lago Llanquihue, la comuna fue creada oficialmente el 22 de diciembre de 1891 durante la presidencia de Jorge Montt, por lo que cumple 129 años de existencia.

El sector donde se asienta el pueblo fue nombrado por el agente de colonización Vicente Pérez Rosales como Puerto Muñoz-Gamero en los primeros años de la colonización alemana, en recuerdo del marino que exploró en 1849 el lago Llanquihue, Benjamín Muñoz Gamero. Pese a ello, Pérez Rosales en su libro “Recuerdos del pasado” de 1882 ya señalaba que el nombre del territorio había cambiado al de Puerto Octay, desconociendo el significado u origen de este nuevo nombre.

Se dice que fueron doce familias de origen alemán las que levantaron el pueblo junto a la costa norte del lago Llanquihue. Ese lugar es conocido hoy como la Playa Maitén y existe una placa en el cementerio católico del pueblo que indica que ese fue el primer lugar donde se asentaron los colonos alemanes. Algunas de esas primeas familias alemanas fueron los Siebert, Mardorf, Ochs, Andler, entre otros, las que llegaron con sus enseres en la embarcación “La fundadora” en enero de 1853.

“DONDE OCHS”

Pero ¿por qué Puerto Octay? La verdad hay muchas teorías y ninguna es categórica en un 100 por ciento. Una de ellas es la propuesta por Carlos Martin en 1909, quien le atribuye un supuesto origen indígena vinculado a una deformación de la palabra “Utai”. Esta teoría la complementaría en 1913 Bernardo Gotschlinch, para quien “Utai” significaría “puerto del costado norte”.

Finalmente, por la misma época el sacerdote jesuita José Harter divulgaría la historia de que, alrededor de 1869, una de las primeras construcciones habría sido el almacén de un colono llamado Cristino Ochs, que por estar siempre bien surtido, la gente de la zona se habría acostumbrado decir «donde Ochs hay», expresión de la cual derivaría el nombre actual del pueblo: Puerto Octay.​

La primera referencia al nombre Octay se encuentra en el decreto del 6 de julio de 1859​ que realiza la división administrativa del Territorio de Colonización de Llanquihue, y donde se le presenta como el distrito N.°3 de la subdelegación de Llanquihue.

El primer alcalde de Puerto Octay fue Federico Gaedicke, quien destacó como escritor y hombre público. Sobresalió como escritor del diario local bajo el seudónimo Quilafritz y escribía crónicas en alemán muy vividas del acontecer de Puerto Varas y Llanquihue en los primeros años del siglo XX.

JUNTO AL LAGO

Puerto Octay fue el principal puerto del sector norte de lago Llanquihue. La península de Centinela resguardaba la ribera del lago de los fuertes vientos e hicieron del pueblo un punto estratégico para las embarcaciones fluviales de fines del siglo XIX.

El lugar se convirtió en uno de los principales  puertos de la cuenca del Llanquihue  y con ello, creció con talleres, industrias, casas, comercio y vapores que recalaban en el muelle. Puerto Varas y Puerto Octay eran los puertos de enlace para la comunicación entre Puerto Montt y Osorno, y más al norte.

Según datos recopilados por Antonio Vera en un estudio de las primeras navegaciones del Lago Llanquihue, "La Fundadora" fue el nombre de la primera embarcación que navegó el lago. Fue construida a fines del año 1852 por orden de Vicente Pérez Rosales, según decreto del Supremo Gobierno. Su construcción se realizó junto a las orillas del lago, en el lugar denominado "La Fábrica", y dio origen al nombre de aquel lugar hasta el día de hoy y también se construyeron dos chalupas para llevar al remolque, destinados al embarque y desembarque de los pasajeros y enseres en los lugares donde era necesario recalar.

En el viaje de inauguración, que efectuó esta embarcación fue el que a la larga permitió el desarrollo de Puerto Octay, pues trasladó a las primeras familias que levantaron el pueblo desde la localidad de Playa Maitén en enero de 1853. El primer piloto de "La Fundadora" fue Pedro María Uribe, los marineros fueron Atanacio Mansilla, Tomás Hernández y Claudio Uribe.

Posteriormente, en 1872 se fabrica el primer vapor que surcaría el lago, el “Enriqueta”, construido y financiado por los colonos Federico Oelckers y Eugenio Schulz, más el apoyo del intendente Felipe del Solar. El primer capitán de este vapor fue Maximiliano Hoelck. Siendo ya obsoleto y debido a la inseguridad que ofrecía por su estado, su propietario lo fondeó en Octay a fines del silo XIX, donde posteriormente fue abandonado hasta que sus restos se hundieron en el fango.

EL DESPEGUE COMERCIAL

Hasta Puerto Octay llegaban todos los productos de la zona para luego ser transportados hasta Puerto Varas y desde allí hasta Puerto Montt y Osorno. Los productos que se comercializaban eran los obtenidos en las tierras cercanas. En sus comienzos eran los mismos colonos alemanes los que hacían producir esta tierra, trabajando la familia completa y muchas veces con la colaboración de vecinos. Cada propiedad poseía una casa donde vivía toda la familia y un muelle pequeño para poder trasladar los productos.

Los productos que se llevaban a Osorno eran trasladados en carretas con bueyes hasta dicha ciudad y los trabajadores que conducían las carretas se proveían de toda clase de mercaderías y necesidades caseras.

Según Antonio Vera, existían en Octay, entre otras, las tiendas surtidas de José Hausdorf, Enrique Martin, Francisco Teuber, Cristino Mardorf, Adolfo Richter, Juan Etcheberry, Juan Appel y Cristino Ochs; hoteles de Luis Haase, Federica Martin, Ernesto Valentín, José Hausdorf y otras pensiones particulares. El molino de Guillermo Simón, después de Francisco Klagges; había dos herrerías, hojalatería, mueblerías, zapaterías; curtiembre de Kalisch; fábrica de bebidas gaseosas y destilería de alcohol; dos boticas, panaderías, carnicerías y otras. 

Los propietarios de vapores y embarcaciones fueron Enrique Martin, Cristino Mardorf, Balduino Martin, José Matzner, Francisco Klagges y otras menores. De todo esto se deduce que Octay en su tiempo fue un pueblo floreciente y de gran actividad que prosperó y decayó junto con la navegación del lago por el año 1957, más de 100 años de influencia lacustre.

La llegada del ferrocarril fue matando de a poco el gran movimiento fluvial en la cuenca del lago. La navegación no era la solución de la falta de conectividad así que con la llegada del ferrocarril a Osorno en 1895 -y posterior construcción de su estación en 1917- y Puerto Montt en 1911 comenzó un auge para varias comunas, pero para Puerto Octay significó el fin de un modo de vida. La zona portuaria de Octay se perdió para siempre al ser destruida por el terremoto de 1960.

ZONA TÍPICA

La comuna de Puerto Octay se ha caracterizado por su arquitectura que mezcla el estilo europeo de sus casas, pero también con el tipo de construcción de los chilotes con tejuelas y tarugos. Esa mezcla es la que le da un aire particular a los octayinos. Así, en 2010, el Consejo de Monumentos Nacionales, dependiente de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), declaró a la ciudad de Puerto Octay como "Zona Típica". 

El espacio nominado abarca un poco más de 23 hectáreas e incluye las calles Pichijuan, Independencia, Pedro Montt, La Esperanza, German Wulf, Urmeneta, Amunátegui y San Agustín. Allí se encuentran, entre otros inmuebles, la Parroquia San Agustín, construida en 1908, desde la cual es posible dominar la vista del entorno; la Casa Wulf Nº2, de 1925, ubicada en una esquina de la Plaza de Armas; el antiguo Hotel Universal, hoy Hotel Haase, y la Casa Niklittschek, que actualmente alberga la biblioteca municipal y el museo El Colono de Octay.

En los últimos años Puerto Octay le ha sacado partido al turismo con su cercanía al bello balneario de Las Cascadas que posee hermosas casas de veraneo, camping, playa pública y un espectacular salto de agua de 50 mts. de altura. También está el Puerto Fonck, bautizado así en honor al médico, explorador, político y diplomático alemán, Francisco Fonck, quien emigró a Chile y se radicó hasta su fallecimiento en 1912. La Iglesia Luterana en Chile posee ahí un templo el cual pertenece a la denominada "Comunidad del Lago", donde además se realizan anualmente campamentos de verano para las familias y jóvenes luteranos en un encuentro a nivel nacional.

​Otras atracciones de Puerto Octay son el Festival El Salmón de Oro, evento musical que se desarrolla durante los días 5 y 6 de febrero en dependencias del Estadio Municipal de Puerto Octay y la “Oktoberfest Puerto Octay” una muestra gastronómica y cultural que se realiza el segundo fin de semana del mes de octubre de cada año en la villa de Puerto Octay.

 

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